amigos hombres, les pido disculpas por lo que voy a decir.
ya escribí sobre esto en otro blog, y pido discuplas también por el anterior.
no lo digo como hembra rencorosa, o talvez si, porque ustedes son los que deciden cuales palabras usar para describir como ven, como perciben, como sienten el escenario y los actores en este teatro de la vida.
si se enojan por lo que digo, lo entiendo, empatizo, da rabia.
no lo digo para enojarles, ni para humillarles, menos para castigarles, por ser del otro sexo.
pero hay que decirlo, el judeo-cristianismo al cortarles el miembro, les ha privado de su inteligencia. fueron violados en la cuna por sus propios padres, entregados por sus madres, a los doctores que decían ser los que salvan vidas y mejoran su calidad, a los rabinos y curas que dicen saber mejor que tu, cómo es tu alma, tu inteligencia, tus valores.
la circuncisación es tortura, es crueldad, es violación, es satánico.
sus miembros expuestos no pueden esconderse, no pueden retraerse al misterio, hacen mecanicamente el coito.
hay algo en la mirada masculina que reconozco inmediatamente si tienen o no prepucio. es una inteligencia sexual. es un saber cuando tienen permiso de avanzar o no lo tienen. el que no posee esta inteligencia esta constantemente viendo por donde, buscando, pidiendo. el que sí tiene, juega con la larga seducción sin pedir, ni buscar, le llega.,
hoy 2020, como es el gran despertar y todo se revela, esta controversia, este tabú viene siendo el primero de los pecados cometidos contra hombres y contra mujeres.
esa disasociación, esa insensibilidad, esa atrocidad es la raíz de la disorfia sexual, de la esclavización y el tráfico de seres humanos, de la guerra interminable, los éxodos, las colonias, el desarraigo, las paranoias, y todos los miedos que sentimos como miembros, y los juegos de palabras, de la gran familia humana.
a parte de ser doloroso y traumático, no hace de un hombre ni más ni menos judío, ni más ni menos cristiano, ni más ni menos musulman.
dicho esta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario